(echarle sal)
Besar la herida
(con limón y menta)
(con limón y menta)
Llorar la herida
(A grito limpio y melancolía añeja)
(A grito limpio y melancolía añeja)
Maldecir la herida
(con veneno inerte y rezos vanos)
Amar la herida
(porque no hay más nada)
(porque no hay más nada)
Amarte a ti
(porque eres la herida)
(porque eres la herida)
Tú no eres la herida.
ResponderBorrarEres un síntoma.
Ella es
más antigua
y más profunda.
Cadena de razonamientos poéticas, a cuyo final contundente te doy mi versión.
Un beso
Un final que da para pensar.
BorrarSaludos Ursus
Receta de una relación. Cocinar a fuego lento ;-)
ResponderBorrarSalud.
Difícil! a veces la paciencia le huye a los amores que se aman intensamente y nada sobrevive a esos incendios. Aunque es una receta que debo intentar!
Borraramor y dolor, inseparables
ResponderBorrarEsto se llama belleza
ResponderBorrarBelleza tu blog completo!
BorrarNuestra definición es herida.
ResponderBorrarY herirnos, es el condimento cotidiano...
ResponderBorrarBesos, Katrina.
Quizás ese dolor es aun más profundo que el ser herida, el ser la daga.
BorrarSaludos!
Me ha gustado mucho, muy real, es así...
ResponderBorrarMuchos besos
Me encantó...muy bueno
ResponderBorrarAbrazos
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