Todo vuelve a mí, una y otra vez. Mi pecho se tensa y siento un leve dolor ante tanta tristeza. Cada vez que sucede me siento más débil, más viejo, más retrasado... como si tuviese que llegar a alguna parte y no lo fuese a lograr. La vida nunca antes me había golpeado tan profundo. Para mi todo era incerteza.
Los hospitales realmente me hacen sentir mal.
Tengo muchos recuerdos fragmentados de visitas al hospital cuando era más pequeño... diría que no es un ambiente al que se deba exponer a los niños, porque son emociones tan intensas y profundas que pueden impregnarnos cuando aún no estamos preparados para asimilar esa energía. Para mi es como si una nube negra se me hubiese pegado desde entonces.
Todo era gris.
Ahora siento la muerte caminando entre nosotros y de alguna forma recuerdo esos días. Tengo miedo de la fragilidad de la vida. Nunca antes había estado en este punto. Nunca antes había sido tan feliz. Nunca antes me había interesado vivir...
Ahora todo es como un milagro del universo y creo que eso es el amor. Pero al mismo tiempo...siento la muerte caminando entre nosotros y el pecho se me encoje y me duele un poco la vida.
A veces los extremos de la vida son difíciles de asimilar
Tengo miedo.