jueves, 6 de noviembre de 2025

34. La Lamentación

Ya tengo 34 años. 

Quisierea decir que enfrento esta nueva vuelta al sol de alguna forma determinada, con un sueño en el corazón o una esperanza movilizadora. Pero lo cierto es que nunca antes estuve tan vacía de proyecciones...




Si algo me impolsa hoy no es lo bueno sino el temor a la angustia y el tormento. Siento que eso le quita inmediatamente todo el valor a lo que haga, porque ¿quién sabiendo que el mal seguirá a sus acciones las realizaría de igual manera como si no tuviese ya ese conocimiento? pues yo lo tengo... o creo tenerlo y entonces no tengo opción.

Palabra de Otro ha venido a mi; "así has de hacer porque asi es como deben ser las cosas" y yo he creido, y he intentado querer lo bueno y he hecho lo que debía hacer y he permanecido en la casa indicada y he esperado el momento justo y he intentado callar lo que causa conflicto y pasar por alto el tono que vasalla mi corazón. Pero mi alma añora otra casa, otra compañia: en cada espacio mi corazón viaja a la fantasía de Otra Forma, una agradabale, dulce y cariñosa, donde lo importante es el encuentro y no la expresión avasalladora que termina callando mi alma y mi voluntad. 

He aquí que me siento sola y perdida, porque aunque hago lo que debería hacer no encuentra contentitud mi corazón. Vivo en una neutralidad constante donde nada turba demasiado y nada enciende la alegría. 

Y hay otras ocasiones donde todo me parece demasiado grande, donde el peso de lo que debo querer me ahoga y se hace insostenible, porque no lo quiero en el fondo (y aqui tiemblo e invoco la angustia y confieso el pecado que soy), porque mi mente fantasea con otro momento, con otra forma y otra existencia... como menospreciando lo de ahora, que viene a ser dado por Dios...  

Ay de mi por senir como siento!

Y entonces la culpa viene a mi y me hiere fuertemente y sigo caminando como por inercia y solo hay lagrimas contenidas en mis ojos, 

                                                                             en mis manos, 

                                                                                         en mi pecho 

                                                                                                 en todo mi ser. 


Porque grande es el dolor que no dejo salir, no sea que aumente la culpa de mi corazón y de mi mente y me aleje aún más de Dios.

.

   .

      .

         .

Hay días en que todo parece claro; 

No hay cosa tal como lo que Otro me ha dicho. Si bien hay una Verdad que viene de Dios y contempla una voluntad y un plan. Yo, no soy parte de ello y no hay necesidad de obligarme a ser Una para un Otro, ni permanecer en un lugar a la espera del que viene. Porque he reconocido que hay Verdad en quien habla, pero la verdad se limita a lo que está escrito y no topa mi presencia, mi amor y mi destino... 

No obstante, otros días esa claridad se borra como la bruma que va cediendo frente al sol  y surge el tormento; la culpame abruma por la falsa claridad de antes... por no sentir lo que debería. Como si hubiese manchado de alguna forma un regalo que se me dio, por no responder a él conforme haría un buen corazón agradecido. Me he quedado en la lamentación por verme en un lugar distante al anhelo de mi corazón... 

Pero cuando cambió esto?

En algun momento creí que todo esto me concernia directamente. Quise ser madre de hijos, quise ser mujer de Un Hombre y quise seguir toda la palaba que Dios había dado. Pero aún no conocía a Dios y a Hombre. Y cuando los conocí temí, porque vi fuerza y poder en su palabra. Pero vi a Hombre y no me pareció agradable en sus formas ni suave con mi corazón, ni cuidadoso con mi alma, sino que avasallador contra mi ser y silenciador de toda mi expresión. Y mi corazón se puso triste y mi voluntad empequeñecio. Y ya no desperté alegre sino que triste, y ya no quise dibujar, cantar ni bailar, sino que sobrevino un gran pesar y un gran cansacio. Y solo podía dormir y esperar que algo pasara. Pero nada pasaba, solo se aumentaban las formas desagradables y el hablar impetuso, solo se callaba más mi voz y mi mirar. Hasta que pensé incluso que podría morir (como mi padre) y descansar hasta el momento de mi juicio para clamar por perdón por no ser como debía, ni sentir lo que debía...  

Es mucha la tristeza que habita en mi corazón y no puede salir. Y no puedo confesar la tristeza sin aumentar la culpa y el dolor, ya no solo en mi sino que también en los de mi casa, en los de mi espera... 

Pero he aquí que no hay salida a mi situación. Puesto que aun cargando el yugo de este dolor y esta frustración amarga de mi corazón, al permanecer sin decir nada parece ante el ojo externo como si nada pasara en mi corazón. Y pueden ver desde fuera mi acto y pensar "ella hace bien, porque se mantiene en lo que se le dijo y no va en contra de la palabra que se le dio". Pero no es así, porque mi corazón rechaza lo que se dijo y solo calla porque no quiere aumentar la culpa y el enojo o la decepcion de Dios y del Hombre. 

Entonces vengo a ser como una infiltrada en la casa de Dios. Y no puedo dar un paso en ninguna dirección y no puedo llorar las lagrimas de mi tristeza y no puedo sacar lo que siente mi corazón.

Y yo sé que nada se puede esconder a Dios porque Él conoce los corazones de todas las personas. Entonces, ya que he fallado frente a Dios por mi corazón, solo puedo mantener los actos conforme a la palabra que se me dio para no aumentar la transgresión... y así, imperfectamente aceptar que es así como soy y es este mi corazón y es imperfecta toda obra que de mi viene.

Nunca antes en mi vida me vi frente a una situacion como la de ahora. Pero he aquí que yo misma me he puesto en este lugar, en esta posición y he hecho lugar para la angutia en mi corazón y me he preparado para el tormento que merezco por cuanto escuché las palabras que se me dijeron y creí, pero no quise el destino que se me señaló. Y querria a veces no haber creído para así poder ir en pos de mi felicidad y no estar amarrada a lo que se me dijo. Pero ya no hay felicidad posible sea que permanezca o me vaya. 

Así me encentro hoy





martes, 18 de marzo de 2025

 Todo el universo convive en mi interior. 

Todo.

Silencio

Se oye el pulso del mundo

como nunca

pálido

la tierra va a dar a luz un árbol.



Todo mi sistema de pensamiento colapsa ante mi. 



Dar a luz...

Entregarse, para dar a luz...

Entregarse





domingo, 29 de diciembre de 2024


Me gustaría poder explicarte lo difícil que me resulta hablar...

Hablar y que me escuchen...
Hablar y escuchar mi voz...

Es como si al hablar la mayor parte de mi quedara en otro mundo...






Como si inevitablemente quien me escuche en realidad no me va a escuchar
                                                                                         no me va a creer
                                                                                          no me va a ver.
                                                                                          no me va a sentir...

Porque la palabra no soy yo
                             ni mi intención,
                             ni lo que pretendo transmitir. 


Y el resto de mi queda atrapado.








A veces, además, tengo miedo de mentir sin darme cuenta, de no ser totalmente precisa en cada cosa que quiero decir y cuando todo se junta en mi cabeza me abrumo.

y no hablo
y no pienso
y no me conecto...







jueves, 7 de noviembre de 2024

33


 Llevo la mirada hacia atrás y descubro antiguos mundos que son parte de este; la felicidad abrumadora, las premoniciones cumplidas, las heridas abiertas, las heridas ya cerradas, el corazón tímido que vuelve a amar… El dolor, la locura y el Sentido. 


Dios




Han pasado tantos años desde que era otra...


¿Podría alguien vibrar como yo vibro, cuando llevo la mirada hacia atrás y me descubro y me desconozco a la vez?


¿Cómo Ser auténticamente frente a la mirada ajena que me mira, pero ve a otra?
La que cree ver;
Mujer
Joven
Profesional
Independiente
Racional
.
.
.


La que soy;
Cristina
al borde del abismo luminoso

La que siente el vértigo de la vida profunda
de las señales  









33 años
"La edad de Cristo". 

viernes, 4 de octubre de 2024

 Vivo escribiendo las historias de otros, las vidas de otros... desenmarañando las complejas dinámicas familiares y transgeneracionales que llevan a las personas a ser como son, a actuar como actúan y sentir como sienten. 

Mi vida se pierde ente tanto sufrimiento...

entre tanto dolor.


Y el cuerpo me duele...



miércoles, 24 de enero de 2024



Vivo sola ahora.



La vida ha dado un vuelco. 



Ahora todo depende de mi




Cansancio...
                      infinito,
                         dulce, 
                         suave y placido...


 Cansancio.

domingo, 6 de agosto de 2023

Tengo un llanto atrapado dentro.
Una desilusión que crece sin parar.
Una angustia que inunda el vacío que ayer dolía 

                              Gota
                                         a
                                              Gota



                           Gota
                                       a  

                                             Gota

sábado, 5 de agosto de 2023

¿Me permitiré ahora explorar la profundidad de mi angustia?
¿Podré nombrar lo terrible y soportar luego la mutilación que generan las palabras?

Quizás me encuentre en el punto final
Quizás me pierda intentado dar un sentido racional a lo que me supera...


Un día vi mi reflejo;
Ingenua, soñadora...

Pero hoy... vacía y marchita,
ardo en un deseo que no comprendo

                                                                                                        

Que no quiero.
Que temo



Las emociones insensatas que siguen a las mariposas comienzan de nuevo a carcomerme
Un veneno ya conocido se expande por mi ser
La sensación quemante de la insuficiencia
y la necesidad angustiosa de que alguien venga...


Pero mi respuesta

Alejarme de todos
Ser silencio





lunes, 24 de abril de 2023

 Sólo en el vacío más absoluto 

puedo 

encontrar  






mi voz...

                mis Palabras...









 

34. La Lamentación

Ya tengo 34 años.  Quisierea decir que enfrento esta nueva vuelta al sol de alguna forma determinada, con un sueño en el corazón o una esper...